La calidad de una semilla asegura el éxito de un cultivo. En el sector agrícola, entender y evaluar estos aspectos técnicos hace que puedas obtener una producción eficiente y de alta calidad. Os contamos algunos de los aspectos técnicos más importantes para medir la calidad de una semilla.
Poder germinativo de la semilla
El poder germinativo es la capacidad de una semilla para germinar y producir una plántula (planta joven) viable en condiciones óptimas. Este indicador determina la viabilidad y calidad de las semillas antes de su siembra. Evaluar el poder germinativo implica realizar pruebas controladas en las que se proporciona a las semillas un entorno adecuado de humedad, temperatura y luz. Un alto poder germinativo significa que una gran proporción de las semillas germinarán exitosamente, algo importante para asegurar una buena densidad de plantas y maximizar el rendimiento de los cultivos. Factores como la frescura de la semilla, su almacenamiento y las condiciones ambientales pueden influir en el poder germinativo, haciendo necesario una manipulación cuidada desde la cosecha hasta la siembra.
Vigor
El vigor de la semilla es una característica que engloba diversas propiedades físicas y fisiológicas que afectan su capacidad para germinar, emerger y establecerse como una plántula robusta en condiciones de campo variables. Este atributo va más allá del simple poder germinativo, ya que considera factores como la velocidad de germinación, la resistencia al estrés ambiental y la capacidad para competir con malezas y superar enfermedades. Semillas con alto vigor tienden a producir plantas más uniformes y saludables, lo que se traduce en un mejor rendimiento y una mayor resiliencia del cultivo. Evaluar el vigor de la semilla implica pruebas de laboratorio y de campo que simulan diversas condiciones adversas, permitiendo seleccionar las mejores semillas para asegurar el éxito del cultivo.
Sanidad
La sanidad de las semillas se refiere a la ausencia de patógenos como hongos, bacterias y virus que pueden afectar negativamente el desarrollo de las plantas. Las pruebas de sanidad incluyen análisis visuales y microbiológicos para detectar la presencia de estos organismos. Utilizar semillas sanas y de calidad ayudará a una mejor calidad y productividad del cultivo.
Humedad
El contenido de humedad de las semillas es otro factor importante. Las semillas con un alto contenido de humedad son más susceptibles a daños durante el almacenamiento y pueden perder viabilidad rápidamente. La humedad ideal varía según la especie, pero generalmente debe estar por debajo del 14% para garantizar una buena conservación.
Peso de Mil Granos (PMG)
El peso de mil granos (PMG) es un indicador utilizado para evaluar el tamaño y la uniformidad de las semillas. Semillas más grandes y uniformes generalmente tienen un mayor potencial de crecimiento y rendimiento. Este parámetro se mide pesando una muestra representativa de mil granos y calculando el promedio.
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