Naciones Unidas y Turquía han informado este martes de que siguen su curso las conversaciones para ampliar el acuerdo que permite los envíos de granos desde los puertos ucranianos del Mar Negro antes de la fecha límite, que concluye a finales de esta semana, según informa Reuters.
Representantes del Gobierno ruso y de la ONU se reunieron en Ginebra el pasado lunes para discutir una posible renovación del acuerdo entre. Rusia y Ucrania para la exportación de granos y fertilizantes por el Mar Negro, el cual vence el próximo 18 de marzo. El acuerdo ha sido crucial para reducir las tensiones entre ambos países y la escalada de precios de los últimos meses, ya que Ucrania es un productor clave de varios cereales a nivel mundial. El acuerdo actual se firmó en julio de 2022 y se extendió por primera vez en noviembre del mismo año.
Rusia se opone a renovar el acuerdo por más de 60 días, ya que considera que solo se está cumpliendo la parte que favorece a Ucrania, mientras que los productos agrícolas rusos siguen teniendo problemas para llegar a los mercados. La ONU ha reconocido que las exportaciones rusas siguen siendo complicadas porque las compañías privadas son reticentes a dar servicio para estas operaciones o para asegurar las mercancías y los barcos. Rusia tiene especial interés en las exportaciones de amoniaco, un ingrediente importante de los fertilizantes que exportaba a través de una tubería que pasa por Ucrania hasta el puerto de Odesa.
La asesora del presidente ucraniano, Daria Zarivna, declaró que Ucrania aboga por un acuerdo de duración indefinida, ya que las exportaciones de cereal ucraniano se destinan a alimentar a 400 millones de personas en todo el mundo. Según Zarivna, Moscú mantiene una postura obstructiva con el objetivo de eliminar a un competidor en el mercado mundial y debilitar la economía ucraniana, así como crear una guerra de información híbrida.
Desde la firma de la Iniciativa de Granos del Mar Negro apoyada por la ONU en Turquía, el 22 de julio, se han exportado millones de toneladas de cereales y otros productos alimenticios desde los puertos ucranianos. Este hecho ha contribuido a la reducción de los precios mundiales de los alimentos, que han alcanzado niveles récord en los meses previos.
Según datos de la ONU, tras el acuerdo – el primer barco con grano ucraniano salió de Odesa a primeros de agosto de 2022 – se han exportado 23 millones de toneladas de cereales y el 55% de estas se han destinado a países en desarrollo. Rusia ha acusado a los países más ricos de beneficiarse del acuerdo y sostiene que no se está cumpliendo con el compromiso de que estas exportaciones se destinen principalmente a los países más pobres, que atraviesan una crisis alimentaria.
A pesar de los esfuerzos, el volumen de las exportaciones de cereales de Ucrania es un 22% inferior al periodo anterior a la guerra, según recoge EFE Agro.